Nuevo PAC prevé obras en ejes estratégicos

Los gobiernos estatales ya enviaron las listas de obras prioritarias y la previsión es que el programa sea lanzado hasta finales de abril.

El gobierno brasileño anunció este inicio de semana el nuevo plan de inversión en infraestructura, en sustitución al Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC). Los proyectos se centrarán en seis ejes estratégicos: transportes; infraestructura social; inclusión digital y conectividad; infraestructura urbana; agua para todos y transición energética.

Según el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, se hará una planificación de largo plazo para traer de vuelta el papel del sector público como inductor de las inversiones estratégicos en infraestructura. Los gobiernos estatales ya enviaron sus listas de obras prioritarias, y los ministerios están identificando otras inversiones estructurales. La previsión es que el nuevo programa sea lanzado a finales de abril.

En el eje de la transición energética, el gobierno debe lanzar licitaciones para contratación de energía solar y eólica y las subastas para nuevas líneas de transmisión, de modo a tornar más rápida y atractiva la implantación de estos parques de energía limpia. El país no perderá la oportunidad de convertirse en una potencia global del hidrógeno verde, destacó Lula. Según él, Petrobras financiará la investigación para nuevos combustibles renovables y, al mismo tiempo, retomará las inversiones en la ampliación de la flota de buques de Transpetro.

En el transporte, Los ferrocarriles, autopistas, hidrovías y puertos volverán a ser pensadas de manera estructurada, reduciendo el costo del flujo de producción agrícola. Además de esto, serán consideradas las concesiones de autopistas y aeropuertos que quedaron desequilibradas, retomando las inversiones previstas, destacó Lula.

En la planificación de distribuir agua para todos, uno de los focos será la reanudación del proyecto de integración del Río São Francisco.

Obras para evitar deslizamientos

Según el presidente, se realizarán obras de prevención de desastres causados por inundaciones y deslizamientos y, con el nuevo marco del saneamiento, el gobierno quiere desbloquear y atraer R$ 120 mil millones en inversiones públicas y privadas para universalizar los servicios de agua y desagüe hasta el 2033.

Con relación al Programa “Minha Casa, Minha Vida” (Mi Casa, Mi Vida), aunque la población de bajos ingresos tenga prioridad, el gobierno brasileño dice que es necesario crear también un programa habitacional para atender a las personas de clase media baja, con ingreso entre tres y cuatro salarios.

Por: Santelmo Camilo